viernes, 14 de noviembre de 2008

PROPEDÉUTICA DEL PEZ

Hay una fotografía de Robert Doisneau, El pescador con la mosca seca, o Pescador de secano, que me fascina desde hace tiempo. En el “quai de la Tournelle”, año 1951, un viejecito elegante y hierático ejecuta con total placidez y perfección uno de los movimientos que conforman uno de los lances característicos de la mosca seca o cola de rata. El anciano, con algo de Améry y Giacometti, tiene los pies dentro de un círculo señalado por una cinta de papel de la que sale a su derecha una línea recta de tiza; sus pies, dentro del círculo, guardan una perfecta correspondencia con el dibujo superior de los brazos, el de la izquierda sujetando con gran delicadeza uno de los ejes del hilo, el otro, el derecho, en ángulo recto atrasado y marcando el giro de muñeca que impulsará la caña hacia delante; el hilo, en la parte superior derecha de la fotografía, se curva en el aire y describe un semicírculo que abandona el marco por arriba. Así, la línea de tiza y la sombra del hombre dibujan otro ángulo recto, mientras la sombra simple del anciano se bifurca al final de la blanca recta en dos sombras paralelas y anónimas que cruzan la raya de tiza. El pescador de mosca seca aparece captado en el momento en que ensaya una de las fases del gesto, combinando en un solo y sencillo movimiento el tiempo corporal que emana de su muñeca, y que luego irá cambiando según la rotación del cuerpo, y la hora solar que le usa como aguja privilegiada en el centro del círculo y a su vez en el centro del paseo; estas dos temporalidades quedan enmarcadas en el bisbiseo a modo de bajo continuo que añade el Sena. De este modo quería Platón que la enseñanza de la aritmética, la geometría, la astronomía y la música fueran conocimientos preliminares a la filosofía, y así creo yo que ese hombre, su caña, el hilo y la ciudad, al fondo, las tiene Doisneau como previas al conocimiento de su arte: el cruce del tiempo con su sombra.

1 comentario:

Tino j. Prieto Aguilar dijo...

Felicitaciones por el programa y el entusiasmo en hacer que la cultura sea un elemento vivo y en dinámica.
Desde 'Encuéntame en las Ondas', enviamos los mejores deseos.
Pino y Tino.